ISO 21469 es la primera norma internacional para lubricantes utilizados en la producción de alimentos y bebidas. Este plan de certificación es actualmente el más completo en cuanto a lubricantes H1 para maquinaria alimentaria, estableciendo unos requisitos de higiene inequívocos para su formulación y fabricación. Klüber Lubrication fue una de las primeras empresas en Europa y la primera en América del Norte en obtener la certificación ISO 21469.
En virtud de ISO 21469, el problema de la lubricación se considera como un todo, y el fabricante se evalúa en consecuencia: no solo se tienen en cuenta el lubricante y sus ingredientes, sino también la manera en que se fabrica, manipula, envasa y almacena. Esto garantiza que el lubricante, por ejemplo, no entre en contacto con otras sustancias, como agentes de limpieza u otros materiales extraños. Incluso el envasado está sujeto a revisión; la ventaja: son lubricantes especiales de alta calidad, producidos limpiamente en un entorno higiénico, ofreciendo ventajas reales de producción.
Dado que ISO 21469 cubre todo el ciclo de vida del lubricante, el fabricante también debe analizar los aspectos higiénicos relativos al manejo del mismo y asesorar al usuario en consecuencia. «Estamos capacitados para ofrecer asesoramiento y ayuda más allá de lo que es la recomendación del producto; esto incluye el uso, la manipulación y el almacenamiento seguro de los lubricantes. Asegurarse de usar la cantidad correcta de lubricante minimiza el riesgo de exceso de lubricación para una mayor seguridad de los alimentos», afirma Paolo Spolaore, Global Market Manager para la Industria Alimentaria en Klüber Lubrication.
